42 Hotel Williamsburg 4*
Servicios principales
-
Wi-Fi gratis
-
Aparcamiento
-
Servicios 24 horas
-
Entrada/Salida exprés
-
Fitness/Gimnasio
-
Salas de reuniones
-
Acceso para sillas de ruedas
-
Aire acondicionado
-
No se permiten mascotas
Ubicación
El 42 Hotel, de 4 estrellas, dispone de un restaurante y depósito de equipajes. Se encuentra en el barrio Brooklyn de Nueva York, a unos 25 minutos a pie del Parque East River y a 4 km de atractivos culturales como la Estación Brooklyn Bridge – City Hall. El hotel cuenta con WiFi en las habitaciones y con un aparcamiento privado en el lugar.
Este hotel está situado en Nueva York, a un paso de la estación de metro la Calle Hewes. El 42 Nueva York está situado cerca de lugares de interés natural como High Line (7 km) y el Parque Fort Greene (3 km). El Edificio Empire State está situado a unos 15 minutos en coche de este alojamiento. El hotel 42 Hotel se encuentra a 15 km del Aeropuerto LaGuardia y en frente de la parada de autobús el Broadway & Montrose Avenue.
Algunas habitaciones disponen de cafetera, una caja fuerte y climatizador, así como de un cuarto de baño privado. Además, el hotel cuenta con servicio de tetera/cafetera y una caja fuerte y detectores de humo. Los cuartos de baño incluyen ducha, además de comodidades como secador de pelo y batas. El hotel ofrece alojamiento con vistas a la ciudad.
El restaurante abre sus puertas cada día para el desayuno. El restaurante el Brooklyn Cupcake sirve una buena variedad de platos de la cocina americana y está a una distancia de unos 7 minutos andando.
Reseña de un crítico de hotel
Tuve el placer de alojarme en el 42 Hotel Williamsburg durante un fin de semana y debo decir que fue una experiencia maravillosa. El servicio fue impecable desde nuestra llegada, con un personal amable que hablaba español, lo cual me hizo sentir como en casa. Las habitaciones, equipadas con comodidades modernas y una vista fenomenal de la ciudad, ofrecieron un refugio perfecto después de explorar Brooklyn. Además, disfrutamos de un delicioso desayuno americano cada mañana, lo que nos dio energía para nuestras aventuras. La ubicación fue ideal para nosotros, con fácil acceso al metro que nos permitió descubrir diferentes rincones de la ciudad. No puedo dejar de recomendar Nyla Cafe, a pocas calles, que complementó nuestra estancia de manera mágica. Sin duda, regresaré a este hotel encantador.
